El sketchbook como origen

En Tinta Esencia, entendemos el sketchbook como un espacio de libertad. En este caso, Miguel Guerrero comparte una doble página de su cuaderno de 13 × 21 cm de Royal Talens, en la que experimenta con tinta, formas y referencias que inspiran su proceso creativo.

Aparecen gestos que recuerdan a grandes dibujantes como @kimjunggius, imágenes que nacen de la fotografía documental (como la mujer protestando), y pruebas de herramientas diversas: la estilográfica Falcon de Pilot, el pincel de agua de Sakura, la tinta Iroshizuku Kiri-same, la tinta Apache Sunset de noodlers, la Zhivago o la Petit Prince Red Fox de Montblanc.

Porque cualquier idea, por extraña que parezca, cabe en un sketchbook. Ahí se gesta lo que luego puede convertirse en obra, letra o trazo definitivo.